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| Fuente, aquí. |
Hace un tiempo conocí una estudiante de psicología que me habló sobre la socialización y tal. Que si somos animales sociales, que de no actuar en consecuencia, se puede llegar a un estado de colapso tal, que es posible confundir realidad y ficción, siendo incapaces de diferenciar lo que se ha vivido con lo que se ha pensado simplemente... o lo que es lo mismo, volverte loco como una regadera, o loco de remate, o como una cabra...
Si es que ya lo decía Aristóteles: "El ser humano es un ser social por naturaleza, y el insocial por naturaleza y no por azar o es mal humano o más que humano... La sociedad es por naturaleza y anterior al individuo... el que no puede vivir en sociedad, o no necesita nada por su propia suficiencia, no es miembro de la sociedad, sino una bestia o un dios." (Fuente, wikipedia de toda la vida).
Empiezo a pensar que algo así comienza a sucederme porque el cine ejerce una gran y excesiva influencia en mí, no cabe duda:
Soñar que Jeff Bridges, mejor dicho, el bueno del señor Lebowski trata, con cierto éxito, de cortejarme (me ha quedado bien lo de "cortejar", ¿eh?)... Pues no flipo yo ná ni ná.
He de añadir que también hacía un bolo en la escena Shakira. Pero ¡Atención! que ahora viene lo mejor: ejerciendo de labor humanitaria como madrina de alguna ONG chupopteras de esas!
¿SHAKIRA?! Pero qué coj...!
-"Ay, mr. Lebowski, ya no volveré a mirarle del mismo modo, ¡gggrrrrriau!"
